La Policía Nacional detiene a seis atletas en una operación contra el dopaje deportivo han sido arrestados en Zaragoza, Madrid y Valencia.
La organización traficaba con medicamentos para mejorar el rendimiento deportivo y se dividía en dos ramas, una marroquí asentada en Calatayud (Zaragoza) y otra etíope con sede en Madrid
La red utilizaba la localidad zaragozana como base de distribución y venta de los productos dopantes, llegando a desplazarse deportistas desde Madrid con el único objetivo de obtener los medicamentos ilegales
Para su abastecimiento, la organización aprovechaba los viajes de diferentes deportistas a Marruecos, Francia e Italia para utilizarles como “correos” y transportar el material oculto en sus equipajes
En los seis registros realizados, los agentes intervinieron fármacos ilegales como hormona del crecimiento, insulina, testosterona o vitaminas inyectables además de elementos para la práctica de autotransfusiones.
>21-junio-2018.- Agentes de la Policía Nacional han detenido en Madrid, Valencia y Zaragoza a seis atletas por su presunta implicación en una trama de dopaje deportivo. La organización tenía un alto grado de especialización y un contacto personal entre sus miembros que facilitaba el traspaso de los productos dopantes. Utilizaban la localidad zaragozana de Calatayud como base de distribución y venta, llegando a desplazarse deportistas desde Madrid para su obtención. En los seis registros realizados se ha intervenido medicamentos ilegales como la hormona del crecimiento, testosterona, insulina o vitaminas inyectables además de elementos para la práctica de autotransfusiones.
Dos ramas compuestas por deportistas de alta competición
La investigación comenzó cuando los agentes recibieron diversas informaciones que implicaban a un atleta profesional en una trama de tráfico ilegal de medicamentos y de dopaje en el deporte. Los policías comprobaron que ejercía como entrenador de atletismo en Calatayud (Zaragoza) y que, habitualmente, contactaba con deportistas para realizar intercambios en mano de lo que parecían ser productos farmacéuticos. Además se pudo constatar que su pareja sentimental era una deportista de alta competición que se encuentra bajo sanción administrativa durante cuatro años por positivo en dopaje.
Tras numerosas gestiones, los policías acreditaron que la organización se dividía en dos grupos en continua conexión. Por un lado, y asentados en Calatayud, la rama marroquí liderada por el entrenador investigado y conformada junto a su pareja sentimental y dos atletas profesionales que se encargaban de facilitar los contactos para intercambiar productos dopantes con otros deportistas. En Madrid, la rama etíope que conseguían los medicamentos ilegales para la organización.
Los agentes comprobaron el alto grado de especialización de la red y el contacto personal entre sus integrantes para pasarse los productos dopantes, siendo Calatayud la base de distribución y venta. Los deportistas se desplazaban en tren desde Madrid hasta la ciudad aragonesa con el único objetivo de llevar a cabo la compra de los fármacos.
“Zanahorias” inyectables y “guisantes” en pastilla
Los investigados utilizaban un lenguaje propio para identificar los productos, hablando de “zanahorias” para referirse de inyectables o “guisantes” para indicar pastillas o píldoras. Para aprovisionarse de los productos dopantes, la red aprovechaba los viajes de deportistas a Marruecos, Francia e Italia para utilizarles como “correos” y transportar el material oculto en sus equipajes.
Una vez analizada toda la información, los agentes llevaron a cabo el correspondiente dispositivo operativo que se saldó con la detención de seis atletas en la provincia de Zaragoza (3), Madrid (2) y Valencia (1). Además se registraron un total de seis inmuebles en la provincia de Zaragoza (3), Madrid (2) y Valencia (1) donde se incautaron medicamentos ilegales como la hormona del crecimiento, insulina, testosterona y vitaminas inyectables además de elementos para la práctica de autotransfusiones.
OTRAS NOTICIAS : LAS LLAMAS, «INCONTROLADAS»
Dos muertos en los incendios que arrasan Gerona
Un vecino ha fallecido de un infarto cuando las llamas rodeaban su casa. Otro ha muerto al tirarse por un acantilado. Hay varios desaparecidos.
Un incendio forestal en La Junquera (Gerona) y otro en Portbou han provocado dos muertos, varios heridos y han arrasado miles de hectáreas. Las llamas han obligado a cortar las comunicaciones por autopista y tren de alta velocidad con Francia y han quemado ya 6.000 hectáreas.
Según han informado los Bomberos de la Generalidad, la situación es «crítica», pues el fuego avanza con mucha intensidad debido al fuerte viento de tramontana que sopla en la zona. Como medida preventiva, los Mossos d’Esquadra han pedido a los vecinos de Llers, Pont de Molins, la Junquera, Agullana, Capmany, Biure, Vilarnadal, Sant Climent, Sescebes y Masarac que se queden en casa y cierren puertas y ventanas. Asimismo han solicitado a los ciudadanos que no se acerquen a la zona del incendio, ya que el fuego quema sin control y el viento está dificultando mucho el trabajo de los bomberos.
El consejero de Interior de la Generalidad, Felip Puig, ha alertado de que el incendio está «absolutamente descontrolado». En rueda de prensa, ha añadido que la velocidad del viento facilita la propagación del incendio, por lo que el fuego «está desbordando cualquier capacidad de reacción, contención y extinción». Se teme, además, que los dos focos lleguen a unirse y que las llamas alcancen Figueras.
Dos muertos
Hasta las 19.30 horas había unas 6.000 hectáreas afectadas por el fuego, y la previsión de Interior es que si no se controla el flanco derecho -de la Junquera a Figueras- se pueda llegar hasta las 25.000 hectáreas quemadas.
El alcalde de Figueras, Santi Vila, ha explicado en declaraciones a los medios que «temen» que el fuego llegue en menos de una hora a la ciudad. Por ello, las autoridades locales están habilitando ya un polideportivo municipal.